¿Qué es la osteopatía o medicina osteopática?
La osteopatía es un sistema de medicina manual que basa sus efectos en las relaciones anatómicas y fisiológicas existentes entre las distintas estructuras corporales. Como disciplina manual, forma parte del conjunto de técnicas de la fisioterapia, que aplicadas sobre tejidos musculares, óseos, conjuntivos y nerviosos obtienen de forma directa y/o refleja reacciones fisiológicas que tienden a normalizar diversas alteraciones musculares, osteoarticulares, orgánicas y funcionales, así como sus manifestaciones dolorosas.
Es fundamental insistir en que las técnicas de osteopatía deben ser aplicadas por un profesional sanitario con una titulación previamente reconocida. Así, si queremos encontrar el reconocimiento legal y oficial de la osteopatía en España hay que buscar en las competencias profesionales reconocidas para los fisioterapeutas en el Real Decreto 1001/2002 de 27 de Septiembre, que contempla: “son funciones de los fisioterapeutas […] la realización de actos y tratamientos de masaje, osteopatía, quiropraxia, técnicas terapéuticas reflejas y demás terapias manuales específicas, alternativas o complementarias, afines al campo de competencia de la fisioterapia”.
Pese a que el osteópata aborda a sus pacientes en base a un concepto holístico y global, pueden diferenciarse tres tipos de técnicas manuales que definen tres áreas de la osteopatía: la osteopatía estructural, la osteopatía visceral y la osteopatía craneal.
¿Qué es la osteopatía estructural?
La osteopatía estructural es el área de la osteopatía que se ocupa de restablecer la movilidad y elasticidad a los tejidos del sistema musculoesquelético. Las manipulaciones características de la osteopatía estructural son las que van dirigidas a liberar y ajustar las articulaciones: son las llamadas técnicas de alta velocidad y baja amplitud (AVBA), técnicas de ajuste articular o técnicas de «thrust» (empuje). Estas técnicas, que se aplican frecuentemente sobre las articulaciones intervertebrales, son las que producen el típico chasquido de la liberación articular. Son técnicas, correctamente realizadas y en manos expertas, totalmente indoloras y seguras, y a menudo producen un alivio inmediato de la sintomatología dolorosa que padece el paciente. De todas formas, pese a la mejoría experimentada por la liberación articular, es importante recalcar que en la mayor parte de los casos es necesario un trabajo posterior sobre músculos y otros tejidos a distancia. Eso es debido a que en muchas ocasiones hay lesiones a distancia que pueden condicionar la aparición de las fijaciones articulares y que, por tanto, deben tratarse en la misma sesión para evitar que el paciente empeore nuevamente a los pocos días.
Así pues, además las las técnicas de ajuste articular, existen otras muchas técnicas propias de la osteopatía estructural que van dirigidas a mejorar la movilidad y fluidez de tejidos musculares y conjuntivos: las técnicas de energía muscular, las técnicas funcionales o las técnicas miofasciales.
¿Qué es la osteopatía visceral?
La osteopatía visceral es el área de la osteopatía que se ocupa de restablecer la movilidad y deslizamiento de las vísceras. La inflamación producida por diferentes enfermedades viscerales, las adherencias producidas por laparoscopias u otras cirugías, así como una marcada atonía visceral pueden condicionar una pérdida de la movilidad visceral y, con ello, la aparición de trastornos y enfermedades. Las técnicas de manipulación visceral son esenciales para mejorar este tipo de patologías que suelen ser refractarias a los tratamientos farmacológicos habituales. Las técnicas viscerales, principalmente presiones mantenidas y deslizamientos lentos de las manos sobre la piel, se caracterizan porque, muy pocas veces, son molestas o dolorosas.
¿Qué es la osteopatía craneal?
La osteopatía craneal es el área de la osteopatía que se ocupa de restablecer la movilidad y elasticidad a las suturas craneales y a la circulación del líquido cerebroespinal. La teoría osteopática propone que la aplicación de leves presiones sobre los huesos del cráneo son capaces de movilizar las suturas craneales y modificar el flujo del líquido cerebroespinal, produciendo cambios beneficiosos en el sistema nervioso central y en el equilibrio tensional de todo el cuerpo. En cualquier caso, las suaves técnicas de manipulación craneal producen un intenso efecto de relajación del sistema nervioso que condiciona una mejoría del paciente.